Entradas

¡Me enamore!

Luego de haber estado sola un tiempo me permití tener una nueva relación, al principio fue fue un poco complicado para mí, sin embargo, al pasar los días, las semanas y el convivir a diario me enamoré. Fue algo inesperado, mágico y maravilloso, así que no dudé ni un segundo en seguir adelante con esta nueva aventura.

Les cuento que ha sido algo muy especial, he sentido y he vivido cosas que antes no había experimentado, es un sentimiento que no podría explicar con palabras, pero si les puedo contar que va más allá de lo físico, lo que siento en mi interior es una conexión realmente mágica, este sentir es totalmente nuevo para mí, me trae enamorada. Me siento tan feliz, y emocionada de haberme dado esta oportunidad.

Esta persona me trata con tanto amor, me acepta tal como soy, con mis luces, mis sombras y mis pequeñas rarezas. Me admira, me valora, me respeta, ama mi sonrisa, cada instante me hace saber cuanto me ama y lo valiosa que soy, se preocupa por mi bienestar. Me motiva, me inspira y me da ese empujón que a veces me hace falta, me reta. En mis días no tan buenos me trata con cariño, me comprende, algo que ha hecho mi corazón vibrar es que en eso momentos me dice; se vale no ser siempre fuerte, se vale no poder con todo, permítete sentirte, y Woow esto para mi es estupendo, ya que casi toda mi vida he jugado el papel de ser fuerte, “yo puedo con todo” y ahora poder expresar mis emociones con toda tranquilidad, sin sentirme juzgada o criticada es maravillosa. Me expresa tanto amor y me hace tan feliz, que se ha convertido en lo más importante para mi.

El haberme permitido esta oportunidad ha sido un gran regalo para mi. Todo ha pasado tan rápido y ha sido tan hermoso que me he comprometido ¿Que lindo verdad?


¿Supongo que querrán conocer o saber quién es esa persona tan especial?


Esa persona ¡Soy yo!

Así es, he aprendido amarme, cuidarme y respetarme, ahora soy mi prioridad y mi mejor compañía. Que he decidido hacer un compromiso de amor conmigo misma, porque una vez que cuentas con tu propio amor, éste te acompaña el resto de tu vida, de modo que estoy haciendo de esta, la mejor relación de mi vida.

¿Saben?
Para poder amar a otra persona, primero debemos amarnos a nosotros mismos. Nadie da algo que no tiene, tampoco podemos dar lo que nos falta. Si no sabes amarte, ni te aceptas tal como eres, encontrarás personas que tampoco lo hagan. Si quieres una persona maravilloso y auténtica a tu lado, se tú esa persona. Cultiva en ti lo que deseas ver en los demás.

Pase lo que pase, te tienes a ti

-María Del Mar-

Soy responsable de mi felicidad

Desde que era muy joven, tenía la creencia que la felicidad venía de lo material y de momentos futuros. Mi mayor anhelo era tener una familia (pareja, casarme, una casa, un
carro e hijos) dado que para mí eso era la vida ideal. Creía que cuando ese momento llegara sería la mujer más feliz del mundo.

Con el tiempo comencé una relación, pero no me permitía ser feliz ya que me faltaba casarme, la casa y los hijos, etc. Luego me casé y tampoco me permití ser feliz, de nuevo me repetía “todavía te faltan los hijos para ser feliz” y así viví durante años. No lograba sentirme satisfecha ni conmigo ni con mi vida. En momentos de alegría me detenía por un momento y me preguntaba ¿estás feliz? y mi respuesta siempre eran ¡no! “todavía faltan cosas para ser feliz” y no disfrutaba el momento. Era como una lista de cosas que debía completar y cuando lograra hacer todas, era que, finalmente, iba a ser feliz, mientras tanto la vida me pasaba en frerte y yo no me permitía disfrutarla.

Luego de varios años, un divorcio, reflexionar sobre lo que realmente quería en mi vida, leer un montón de libros, escuchar audios y ver vídeos de autoayuda y superación personal, aprendí y entendí que la felicidad no es una meta sino una actitud y depende solo de mí, que la vida se vive de adentro hacia afuera, no de afuera hacia adentro, viviendo el momento presente, apreciando las pequeñas cosas de la vida. Comencé a ser consciente de que nada de lo exterior me va a ser feliz si yo no lo permito.

No fue fácil, fue un proceso necesario que debí pasar para desintoxicarme de esa creencia falsa, pero cuando por fin lo logré, comencé a disfrutar cada momento, cada vivencia y cada cosa que hacía, siendo consciente de ese sentimiento de felicidad, buscando cualquier pensamiento que me generara emoción y alegría. Hoy en día puedo decir que soy una persona feliz, aún sin ninguna de las cosas de aquella lista, soy feliz hoy, soy feliz ahora y decido ser feliz siempre. Me libero de esa tonta lista y de las falsas creencias.

Hoy ¡ME PERMITO SER EXTREMADAMENTE FELIZ!